| Te pusiste los zapatos del revés
|
| Y empezaste a dar pasitos hacia atrás
|
| Desplegaste el paraguas del olvido
|
| Para que no te mojara la verdad
|
| Tu soberbia te ha afectado a la memoria
|
| Y tu mirada ya no apunta al corazón
|
| De repente, niña, te quedaste sorda
|
| Para todo el que no te diera la razón
|
| De la noche a la mañana le has pegado una patada
|
| A ese castillo de sueños que los dos
|
| Poco a poco, beso a beso hemos ido construyendo
|
| Con arena de nuestra ilusión
|
| Yo no soy ningún juguete, soy persona!
|
| Ya lo ves, yo no tengo el corazón de madera o de papel
|
| Yo no soy ningún juguete, soy persona!
|
| Ya lo ves, y me duelen las cositas que no puedo comprender…
|
| La mentira se posicionó en tu boca
|
| Y desde allí le disparó a mi corazón
|
| Te vendaste los ojitos con orgullo
|
| Y en tu alma se apagó la comprensión
|
| De la noche a la mañana le has pegado una patada
|
| A ese castillo de sueños que los dos
|
| Poco a poco, beso a beso hemos ido construyendo
|
| Con arena de nuestra ilusión
|
| Yo no soy ningún juguete, soy persona!
|
| Ya lo ves, yo no tengo el corazón de madera o de papel
|
| Yo no soy ningún juguete, soy persona!
|
| Ya lo ves, y me duelen las cositas que no puedo comprender…
|
| De la noche a la mañana le pegaste una patada
|
| A ese castillo de sueños que los dos
|
| Poco a poco, beso a beso hemos ido construyendo
|
| Con arena de nuestra ilusión
|
| Yo no soy ningún juguete, soy persona!
|
| Ya lo ves, yo no tengo el corazón de madera o de papel
|
| Yo no soy ningún juguete, soy persona!
|
| Ya lo ves, y me duelen las cositas que no puedo comprender |