| Viene el olor a otra sudestada
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| Trae el olor a leche cortada
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| Se intuye un sol naciente, incipiente
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| Detrás del nubarrón ni se siente
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| Drena como una bruma infectada
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| Trae explicaciones lacrimógenas
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| Nadie puede creer, doy fe
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| Si una estrella nos guÃa, no se ve
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| No se ve, no se ve
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| Veo en un temblor de cara
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| Paralización y rabia
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| Trae el viento otras voces
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| Las oÃs, es una sinfonÃa de raÃz
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| Como un trueno ronco, ancestral
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| Del centro mismo de la tribu
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| Todos juntos, en una inmensa soledad
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| Un abrazo tuyo no vendrÃa nada mal
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| Remolinos de semillas, buscando tierra
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| Para florecer
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| Y yo te ofrendo esta bronca
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| Pa' que la lleves al mar
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| Pa' que no lloren los mÃos
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| Rodillas en la ciudad
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| Y yo te pido esa fuerza
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| Toda tu cruel decisión
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| Pa' que este sueño partido
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| Despierte revolución
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| Estabas ahÃ, parada en el cordón
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| Con la cabeza gacha
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| Como pidiendo perdón
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| Al otro dÃa estabas
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| En el umbral por el olor sabÃa
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| Que estaba todo mal
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| Miré con odio al cielo
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| Y pronto blasfemé Porque lo que traÃas
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| Era todo nuestro descarte
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| Nuestras pestes, plástico
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| Hedionda polución, miseria
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| Abortos de millones de corazones
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| Hechos mierda
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| Mientras más subÃas
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| Me dio por escapar
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| Me fui para el techo
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| No quedaba otro lugar
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| Flameaba mi bandera
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| Blanca y celeste
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| Ya sin paz ni cielo
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| El paraÃso se hizo peste
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| Todo lo que tirás al rÃo, vuelve
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| La pólvora mojada de otro temporal
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| Para nada sirve el sol
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| No va a evaporizar
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| Millones de litros de lágrimas
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| Remolinos de semillas, buscando tierra
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| Para florecer
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| Y yo te ofrendo esta bronca
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| Pa' que la lleves al mar
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| Pa' que no lloren los mÃos
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| Rodillas en la ciudad
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| Y yo te pido esa fuerza
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| Toda tu cruel decisión
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| Pa' que este sueño perdido
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| Despierte revolución
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| Y yo te ofrendo esta bronca
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| Pa' que la lleves al mar
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| Pa' que no lloren los mÃos
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| Rendidos en la ciudad
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| Otra sudestada |